Los aranceles y los cambios en la producción amenazan a Fender y al futuro de las guitarras «Made in USA»
Los aranceles golpean a los fabricantes de guitarras: ¿cómo afectarán a los músicos?
Cómo los aranceles y los cambios en la producción amenazan a Fender y al futuro de las guitarras "Made in USA" · Fuente: A.Cordes
Fender Musical Instruments Corporation (FMIC) se enfrenta a un importante reto financiero, ya que los aranceles recientemente impuestos ejercen una presión adicional sobre sus costes de explotación. Un reciente informe de Moody’s rebajó la calificación crediticia de Fender, citando la preocupación por el aumento de los gastos de producción y un entorno económico cada vez más complicado.
Fender se enfrenta a un aumento de costes debido al impacto de los aranceles sobre la producción fuera de EEUU
El impacto de los aranceles podría dar lugar a un aumento estimado de entre 20 y 25 millones de dólares en los costes, debido principalmente a la dependencia que tiene Fender de las instalaciones de fabricación en Ensenada (México) y China. Se espera que estos nuevos costes financieros afecten en mayor medida a las líneas de guitarras de gama media y de iniciación de Fender, ya que la competencia en este segmento sigue siendo muy dura. La cuestión ahora es si la empresa puede absorber estos costes, o si los consumidores se encontrarán pronto con precios más elevados en algunas de las guitarras eléctricas más populares del mercado.
En el centro del problema está el creciente coste de producir guitarras en Estados Unidos, especialmente si se compara con las alternativas extranjeras. El aumento de los aranceles sobre los componentes importados y los productos acabados significa que cada guitarra construida en Ensenada o China, y luego vendida en Estados Unidos, tiene un precio más alto.
Aunque Fender ha insistido en que sus productos cumplen las normas de origen del Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (USMCA), los aranceles todavía podrían tener un efecto significativo. Si se aplica un arancel del 25% a los productos procedentes de México y un arancel del 10% a los procedentes de China, el consiguiente aumento de precios podría encarecer considerablemente muchos modelos de Fender. Con el aumento de los costes de producción y un mercado de consumo ya estancado, Fender podría tener dificultades para mantener su competitividad, sobre todo frente a instrumentos de menor coste fabricados en Indonesia y Japón, donde los estándares de producción han alcanzado nuevos niveles de calidad.
Los nuevos aranceles podrían encarecer los instrumentos fabricados en EEUU
Este problema va más allá de Fender, ya que la industria de la guitarra en general corre el riesgo de sufrir cambios estructurales a largo plazo. La etiqueta «Made in USA», antaño símbolo de prestigio y fabricación profesional, se ve cada vez más amenazada por el aumento de los costes de la producción nacional. Compañías como Gibson, Martin, Mesa Boogie y Friedman también podrían enfrentarse a retos similares, con sus modelos de gama alta cada vez menos accesibles para el músico medio. Y eso, por supuesto, tiene un impacto global.
Los fabricantes boutique que han construido su reputación sobre la base de instrumentos de alta calidad fabricados en los EEUU, pueden verse obligados a explorar la fabricación en el extranjero o a aumentar significativamente los precios. Ante esta situación, muchos compradores podrían recurrir al mercado de segunda mano, que podría experimentar un aumento de la demanda a medida que los instrumentos nuevos resulten demasiado caros para muchos músicos. Además, es posible que los minoristas reduzcan sus existencias de instrumentos Made in USA y den prioridad a las importaciones más asequibles.
¿Está en crisis la industria de la guitarra?
Las implicaciones a largo plazo de estos aranceles podrían modificar el mercado de la guitarra y afectar tanto a las grandes marcas como a los luthiers independientes. Es posible que Fender y otros fabricantes tengan que trasladar aún más su producción fuera de Estados Unidos, pero esa medida conlleva riesgos para la identidad de marca y la fidelidad de los clientes. Muchos músicos se enorgullecen de tocar instrumentos construidos en California, Tennessee o Pensilvania, y si la producción se traslada a otro lugar, los compradores pueden preguntarse por qué deben seguir pagando precios más altos.
Además, los problemas logísticos, como la doble imposición de los instrumentos fabricados en Asia, que luego se envían a EEUU para su control de calidad final, y se vuelven a exportar, podrían aumentar aún más los costes. En última instancia, la supervivencia de los fabricantes estadounidenses tradicionales de guitarras puede depender de su capacidad para sortear estas presiones financieras, y mantener al mismo tiempo la calidad y la reputación en un mercado cada vez más globalizado.
¿Podrían los aranceles reducir el número de instrumentos fabricados en los EEUU?
Los próximos años serán determinantes para Fender. Si la empresa no puede contrarrestar los efectos de estos aranceles y el aumento de los costes, podría sufrir nuevas rebajas de su calificación crediticia, lo que podría limitar las inversiones futuras y el desarrollo de productos. Mientras que competidores como Gibson se han recuperado de sus dificultades financieras gracias a la reestructuración, Fender debe tomar medidas decisivas para no correr la misma suerte. Queda por ver si esto significa más fabricación indonesia, ajustes de precios o estrategias empresariales totalmente nuevas. Una cosa está clara: el futuro de las guitarras «Made in USA» está en una encrucijada, y las decisiones que se tomen hoy determinarán el mercado en los próximos años.
Aún no hemos recibido ninguna declaración oficial ni de los fabricantes, ni de los minoristas, ni de los distribuidores. Por lo tanto, de momento todo esto debe considerarse mera especulación. Debemos seguir atentos a la situación política. Y por supuesto los sectores de sintetizadores, estudios y tecnología también se ven afectados. Si planeas comprar un instrumento que podría verse afectado por esta nueva coyuntura económica, te recomendamos que actúes con rapidez.
