Leyendas del rock: Cómo sonar como Led Zeppelin
Analizamos el proceso de grabación y parte del equipo utilizado en la creación de Led Zeppelin II, considerado con frecuencia como el álbum más heavy de la banda.
II, el segundo álbum de Zeppelin, supuso un claro alejamiento del estilo emotivo y melancólico de su debut, y desplegó el enérgico sonido rock basado en riffs en el que piensas cuando dices «Led Zeppelin».
Aunque el álbum se considera un clásico, la mayor parte de la composición y grabación se realizó mientras la banda estaba de gira entre enero y agosto de 1969.
Sin duda, esto influyó en el estilo musical. Como la banda nunca planeó hacer un álbum superventas y multiplatino, las canciones se crearon como preparación para la siguiente gira, que era su objetivo principal.
The Led Zeppelin Sound
Se utilizaron múltiples estudios, incluidos Olympic y Morgan Studios en Londres, Mirror Sound en Los Ángeles, así como A & R, Juggy Sound y Atlantic Studios en Nueva York.
La producción del álbum estuvo liderada por Jimmy Page, que también ayudó a Eddie Kramer con la mezcla y, en general, tuvo la última palabra en el proceso de toma de decisiones.
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1959 Gibson Les Paul
El principal cambio se produjo cuando Page decidió sustituir su Telecaster por la ya emblemática Les Paul del 59 que le compró a Joe Walsh. Con ella podía producir sonidos con sustain y feedback controlados, algo que sencillamente no era posible con una Tele.
El mástil había sido ligeramente rebajado para facilitar una interpretación más elaborada, y se le había instalado un conmutador push-pull para la fase de pastillas, lo que la convirtió inmediatamente en un instrumento más interesante.
Hoy en día, 59 Les Paul sigue siendo venerada como una de las mejores guitarras Gibson de todos los tiempos, y muchos héroes de la guitarra inspirados en Page han usado posteriormente diseños similares.
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Kit de batería Ludwig de arce
Alrededor de 1968, Led Zeppelin solía salir de gira con un grupo estadounidense de rock psicodélico llamado Vanilla Fudge. El batería del grupo, Carmine Appice, tenía dos bombos de 26 x 14 pulgadas que inspiraron a John Bonham para su próxima batería.
Con la ayuda de Appice, Bonham consiguió un contrato de endorsement con Ludwig y enseguida encargó la misma configuración de doble bombo de 26 pulgadas. También incluía un bombo de 22 pulgadas equipado con aros metálicos para utilizarlo como timbal base, así como un timbal base de 18×16 pulgadas y un tambor tenor de marcha de 15×12 pulgadas que se utilizaba como tom.
Teniendo en cuenta lo fuerte que Bonham golpeaba la batería, capturar el sonido de este kit sería todo un reto en las sesiones de grabación. Sin embargo, se convirtió en un factor clave del sonido de Led Zeppelin en los años siguientes.
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Fender Jazz Bass de 1961
Aunque muchas fuentes afirman que era del 62, John Paul Jones confirmó que compró su Fender Jazz Bass de 1961 en 1964, el cual se convirtió en su instrumento principal para sesiones y giras.
Las dos pastillas single-coil del J-Bass le proporcionan una mayor versatilidad tonal, ya que puedes mezclar la señal de las dos pastillas y crear una gama de sonidos diferentes según la canción en la que estés trabajando.
Además, el J-Bass tiene más garra y ataque en los medios que su primo el P-Bass, lo que sin duda encajaba mejor con el sonido de Led Zeppelin.
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EMT 140
Los estudios A & R donde Kramer y Page mezclaron Led Zeppelin II, tenían tres reverberaciones plate EMT 140. El EMT 140, una creación alemana de 1957, utilizaba un transductor electromecánico para hacer vibrar una gran placa de chapa metálica.
Aunque pueda parecer un diseño primitivo, hoy en día la EMT 140 está ampliamente considerada como la mejor reverb tipo plate de todos los tiempos. Goza de una gran reputación en grabaciones de música, cine y programas de radio y televisión por la forma en que puede enfatizar el sonido natural de una sala.
Hoy en día existen muchas versiones de la EMT 140 en formato plug-in, como la Soundtoys Superplate, que ofrece una solución versátil para su uso en los modernos procesos de producción musical.
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Scully 280
La mayoría de los efectos que se escuchan en Led Zepellin II se crearon con grabadoras de cinta, lo cual es un dato sorprendente. Es difícil imaginar la creación de música sin efectos digitales, pero Eddie Kramer era un maestro con su Scully 280 de 1 pulgada y 8 pistas.
La 280 era una grabadora de transistores que se introdujo en 1965 y rápidamente se convirtió en un duro competidor en el mercado junto con Ampex. Su diseño también se ganó el favor de quienes disfrutaban editando cinta o la utilizaban para crear efectos, como Kramer.
Aunque tiene un sonido muy particular, ya no hace falta una grabadora de carrete para crear auténticos efectos de cinta estilo vintage, ya que por ejemplo el plugin Strymon Deco produce unos estupendos resultados.
¿A cuál de tus artistas favoritos te gustaría ver en nuestra serie «¿Cómo sonar como…?». Háznoslo saber en los comentarios.
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