El orden de los pedales de efectos: una guía rápida
Un tema eterno, ¿cómo ordenar los pedales que tenemos? En la guía de hoy, vamos al grano, sin apenas matices: simplemente vamos a contar, claro y meridiano, cuál es la fórmula clásica con la que no hay error posible.
Cuando uno solo tiene un Boss Metalzone y un afinador, pocas dudas surgen. Tanto monta, monta tanto, en lo que respecta al orden. Pero cuando a uno le pica el gusanillo de los pedales y se junta con una EQ, un fuzz, un delay, un chorus, y un wah… ahí ya es más razonable empezar a cuestionarse cosas.
¿Cuál es el orden ideal de nuestros pedales?
Muchas opciones serían válidas, pero como os hemos prometido mojarnos sin entrar en detalles, vamos a daros lo que hemos prometido. El orden ideal es este:
Pues esa es la cosa, aunque claro, todo merece una explicación, así que vamos a darla.
Efectos Pre
Algunos están en esta sección porque necesitan la señal más pura, no adulterada, para funcionar mejor. Es el caso del afinador y el Whammy, los dos necesitan «leer» la afinación, de modo que cuantas menos cosas le ocurran a la señal, más legible es.
Los demás están aquí por razones sonoras: es la posición típica del wah, que cambia mucho si carácter si lo ponemos detrás de las distorsiones. Por su parte, el compresor puede funcionar bien antes y después de las distorsiones, pero esta es la ubicación en que lo usan más guitarristas.
Finalmente, y aunque puede sorprender a algunos, hemos ubicado aquí el Phaser (y por extensión, los Univibes), ya que desde su invención en 1968, fue bastante habitual que se conectara a la entrada de un amplificador saturado, lo cual es similar al hecho de ponerlo antes de las distorsiones.
Saturaciones
Este es el apartado que crea una frontera, una línea de ecuador en nuestro equipo. El sonido de los otros pedales dependen enormemente de si están antes o después de esta sección.
No hay una norma fija en el orden interno de esta sección: no es ninguna barbaridad poner el overdrive antes de la distorsión o al revés, por ejemplo. Es cuestión de gustos. Pero sí hay un cierto consenso en poner los fuzzs al principio, ya que a veces funcionan mejor con una señal lo más parecida a la que entrega nuestra guitarra de origen, y por ello lo hemos puesto más bien al principio. De hecho, algunos son tan sensibles que pueden funcionar peor con efectos de la sección Pre, como Wahs o compresores.
Lo que sí hemos hecho es poner un boost en segunda posición, ya que en ese sitio tendrá la capacidad de incrementar la ganancia de cualquier pedal que pongamos después. Es muy útil cuando ya tenemos un sonido de overdrive o distorsión que nos encanta, pero queremos que sea un poco más salvaje. Como veremos más adelante, poner un boost en último lugar tendrá un efecto muy diferente.
¿Qué hace ahí el pedal de volumen?
No es un pedal de saturación, realmente. Pero lo hemos puesto ahí por un buen motivo, aunque rompiendo un poco con la tradición.
Usualmente, los guitarristas ponen el pedal de volumen al principio del todo (antes incluso de los efectos Pre) o al final del todo. En el primer caso, el pedal de volumen puede regular parcialmente la cantidad de distorsión que tenemos, de un modo similar a como lo hace el potenciómetro de volumen de nuestra guitarra. En el segundo caso, hace de volumen máster, eliminando completamente el sonido cuando está a cero, no dejando ni rastro del sonido. Aunque estuviese sonando un eco o una reverb, se lo zampa.
Pues bien, no hemos elegido la primera opción pensando en los principiantes, ya que normalmente cuando piensan en «volumen», piensan en algo como el volumen de una radio o del coche: no cambia lo que escuchamos, solo varía cómo de fuerte suena. Pero tampoco hemos elegido la segunda opción, porque nos parece guay que las colas de delay y reverb no se trunquen de forma abrupta.
Ponerlo tras las saturaciones, pero antes de los efectos de modulación y tiempo nos ha parecido una buena solución de compromiso.
Efectos Post
Hay costumbre de poner aquí algunos efectos como el trémolo, el flanger o el chorus, aunque también dan sonidos bastante agradables antes de las saturaciones; algo más borrosos, pero en el buen sentido. El que sí que tiene que estar aquí, a nuestro parecer, es el armonizador, un efecto que copia nuestras notas y varía su afinación para crear armonías. Puesto antes de las saturaciones se forma un batiburrillo que puede estar bien a veces, pero no es lo que la mayoría de la gente suele buscar en ese efecto.
En cuanto al delay y la reverb, seguro que alguien te ha comentado ya alguna vez que suelen ponerse en ese orden y después de la distorsión, así que no creemos que te sorprenda.
Lo que sí te puede intrigar es el volver a ver el boost aquí. Pues es uno de esos casos en que un mismo efecto hace dos funciones diferentes según su posición en la cadena; el anterior era para «aumentar distorsión», este en cambio, aumentará el volumen final, y es ideal para tocar solos de guitarra que se oigan más fuerte, pero sin saturar ningún pedal que venga después.
¿Dónde esta la puerta de ruido?
Su uso óptimo es algo más complicado y lo dejaremos para otro post, pero ya te avanzamos un chivatazo: ocupa dos posiciones al mismo tiempo. No es del todo como lo hemos explicado, pero es similar, y es para sacar el máximo partido a su funcionamiento.
¿Y la EQ?
La ecualización es un efecto que puede usarse creativamente, pero tradicionalmente es una correción. Puede ubicarse en cualquier punto que lo requiera, pero los guitarristas suelen ponerla antes de las saturaciones para ajustes muy precisos y menos evidentes en el resultado final; y después de las saturaciones cuando lo que buscan son transformaciones sonoras más agresivas.
Conclusion final
Ya sabemos que el orden de los pedales se puede alterar simplemente para experimentar, pero a veces viene bien una explicación que no se ande con rodeos, y es lo que hemos intentado ofrecer. Esperamos que te haya servido para saber en qué orden poner tus pedales, tanto si son físicos, como si son emulaciones de un multiefectos.
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